
Puede ser un carrito de la compra atropellado que rompa la máquina o el meteorito que acabó con los dinosaurios. Es lo bonito de estos viajes.
Esta vez fue la moda. La moda de todos los veranos. Los incendios forestales que junto con las orquestas pachangueras y la canción del verano no faltan a su cita estival.
Un foco por extinguir cerca de la via nos regaló 30 minutos de retraso con subida y bajada del tren e intento fallido de continuar viaje por carretera incluido.
La aventura de viajar con Renfe. Y sin suplemento adicional en el billete.


1 comentario:
Aventuras, vivencias... Todo por el mismo precio. No te quejes, hombre!
;) Beso
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