Ya está. Ha muerto. Un tiro en la cabeza y se acabó todo. Un hijo de puta asesino menos del que preocuparse. El terrorista más buscado de los últimos diez años ha pasado a mejor vida. Ojo por ojo ejecutado por parte del nobel de la paz y ahora a esperar acontecimientos, que los habrá.
El mundo es ahora más seguro. Tenemos la seguridad de que existe un gobierno en el mundo al que no le importa anteponer su sed venganza colectiva a celebrar juicios en los que puedan salir ellos mismos salpicados en pos de librarnos de la lacra del terrorismo (el de otros, claro está). Así que mientras estemos de su lado y les hagamos genuflexiones (nuestro gobierno ya ha empezado) no tenemos nada que temer.
Se habla de justicia, pero la justicia es otra cosa.
2 comentarios:
Miedo verdadero ...
Muy bueno, veo que te estas animando de nuevo :)...genial!
Publicar un comentario